¿Día de Muertos o Halloween?

En muchas culturas en el Hemisferio Norte, tanto antiguas como modernas, se considera a Octubre como un mes de mucha magia. Para nuestros ancestros, simbolizaba el mes de la cosecha y la última oportunidad para tomar previsiones frente al crudo invierno. Era un mes de preparación conforme los días se volvían más cortos y las noches más largas y oscuras.

Adicionalmente, se consideraba un mes que marcaba el regreso de nuestros seres queridos fallecidos y de otros seres mitológicos: el último día de octubre – llamado Samhein por algunas creencias paganas – se les permitía vagar por el mundo para visitar a sus familiares, entregar mensajes o, incluso, reclamar venganza.

Por ello, las personas solían dejar alimentos preparados, bebidas y ofrendas para sus muertos y toda aquella criatura extraña que decidiera manifestarse durante esa festividad. Con el tiempo, algunas personas decidieron disfrazarse de criaturas tenebrosas para poder degustar la deliciosa comida y los regalos que se ofrecían. Algunos incluso hacían trucos de magia o atrevidos malabares para llamar la atención de las familias y ganarse como premio una parte de las ofrendas.

Actualmente, esta festividad se transformó en Halloween, que ahora es considerada ¡la segunda festividad más comercial del mundo! Si bien hay quienes afirman que se celebran conceptos oscuros y malignos, en su origen eran creencias que no se asociaban con nada maligno, sino con relatos milenarios.

En nuestro país, la tradición era un poco distinta: las tribus Mesoamericanas compartían la creencia de que los muertos regresarían de visita, solo que un par de días más tarde, y se preparaban para ello erigiendo magníficos altares con ofrendas específicamente diseñadas para complacer a nuestros amigos y familiares que habían pasado a mejor vida. Estas muestras de cariño y creatividad eran tan complejas que incluso se le atribuye un significado al número de niveles con los que cuenta un Altar de Muertos, así como los colores con los que se decoraban.

Como puedes ver, no son conceptos muy distintos. De hecho, la creencia que da origen a ambas tradiciones es prácticamente la misma. ¿Tú celebras alguna de estas festividades? ¡Cuéntame cuál!

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